En Bogotá se podrá pagar para no tener pico y placa

El pico y placa es una medida que se estableció en la primera alcaldía de Enrique Peñalosa para disminuir el uso del carro en las vías de Bogotá. De todas maneras, con el pasar del tiempo, el parque automotor ha ido aumentando. Según cifras de la Secretaría de Movilidad, en 2005 había 590.939 vehículos particulares y hoy hay cerca de 2.400.000, gracias a las oportunidades de crédito que han abierto los concesionarios. También a que muchos compraron un segundo carro para evadir la medida. 

Por eso, la saliente administración de Peñalosa expidió un decreto que permite no tener pico y placa a cambio de un aporte para la ciudad del orden de los 4 millones de pesos anuales (se podrá pagar 2.066.000 millones semestralmente). Con esta se busca dos cosas: desincentivar la compra de un segundo carro y generar ingresos que se puedan invertir en mejorar las condiciones de movilidad de los ciudadanos. El dinero será destinado para subsidios de TransMilenio, SITP y a futuro el Metro. 

La administración espera recaudar 170.000 millones de pesos el primer año y más de 400.000 millones de pesos en cinco años. El decreto además que los casi 15.000 carros blindados que hoy no tienen restricción, empezarán a tener pico y placa. Estos también podrían circular todos los días si pagan por no acogerse a la medida. Así  mismo, las camionetas con platón, que no tenían restricción, ahora también la tendrán y la opción de pagar para libre circulación. 

Los únicos vehículos que seguirán exentos del pico y placa son los que hacen parte de la Unidad Nacional de Protección.

La medida se había discutió por varios meses en el Concejo de Bogotá. Según ha dicho el secretario de Movilidad, Juan Pablo Bocarejo, después de analizar el alcance que podría tener la medida, se concluyó que alrededor de 50.000 propietarios de vehículos estarían dispuestos a pagar por el beneficio de moverse todos los días por Bogotá. En la segunda semana de enero de 2020 empezaría a aplicarse la medida.

Esta medida ya fue implementada en Cali. Allí los ciudadanos pagan 2‘500.000 pesos al año para quedar libres del pico y placa.